Cuándo mi alegría se hizo gris, cuando mis sueños huyeron de mi, cuando la esperanza emigró al sur, cuando en el amor perdí el hilo... poco a poco fui defendiendo mi derecho a la felicidad, con hilos de paciencia teji una coincidencia, enlazando risas a los latidos aburridos de mi corazón.
Hoy estoy aquí, paciente esperando por mi vida para continuar...atando en silencio mis sueños para que no huyan.
Esta morocha se declara atada a un rabo de nube, un piropo y un poema hoy me acompañan, despacio sé que volveré a creer en para siempres, poco a poco
Mientras sigo buscando un nuevo motivo...
miércoles, 17 de marzo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario